Lo que el tiempo nos dejó.

   

Dibujo de Lorraine Sorlet.

 Dos cuerpos separados

 juegan

 a ver cuál es más cortés.

 Dejan pasar los días,

 engañan al tiempo,

 porque saben

 que ante el más mínimo roce

 de sus pieles

 todo puede volver.

Entonces eligen el silencio,
el misterio

y la poesía

porque al valor,
al coraje

y a eso que estuvieron por ser

lo aplastó la cobardía.

Colapso.

El deseo reprimido,
prohibido,
de lo que no nos animamos
pero tampoco podemos.

La curiosidad
que no sería más que eso
porque sino
no habría marcha atrás.

La decisión sin tiempo
y el pensamiento
que interrumpe el ruido del tren,
pasando una vez más
tan pero tan
cerca,
que da miedo.

Día malo

A un sonido brusco

de volverme loca

camino por el borde

de la realidad

y vacilo.

De inocencia a picardía.

Algo se pierde

en la transición.

 -

 Me vi de niña,

libre,

aferrada al manubrio

de tiritas brillantes

que salían por los costados.

 -

Deseé

por un momento

vivir en la memoria.

Malos hábitos.

                                                       Una esquina viscosa

con una lágrima anclada

Dibujo de Lorraine Sorlet.

 que no se deja

desprender

porque sabe

que no tiene el derecho.

  * * *

El sentimiento irrevocable

de amor y dolor

heterogéneo

conservado

en un mismo frasco.

                                                        * * *

         La manía de la pregunta

sin respuesta

y de dormir

con tu remera

en la cama de otro,

sin culpa.

Miedo.

Cuando la presión en el pecho

te agarre desprevenido

y no sientas más

que vacío,

la desesperación

te va a cubrir capa por capa

y pensarás

que no hay solución alguna.

Como quien prende un sahumerio 

para calmar la ansiedad, 

en un mundo de mucho ruido 

y poca calma.

Reunión de emociones.

En una sala llena

De un montón expectativas

sentadita estaba

la desilusión.