viernes, 18 de octubre de 2019

Condenados al placer

Una gota de sudor
cayó en mi boca
y despertó el sabor
del mar y la lujuria.
Los mentones
se chocaron como placas
y todo tembló.
La noche
se hizo más clara
y caímos rendidos
uno encima del otro.



No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Dialogo profesional

-Sabes qué Marie, a veces me preocupa entender a fondo los problemas de los pacientes psiquiátricos, maníacos, bipolares, trastornados o dep...